Familiares del joven de 20 años, Ángel Eduardo Cardia acudieron a la Comisión Estatal de Derechos Humanos para iniciar una queja en contra de elementos policíacos de Emiliano Zapata, quienes presuntamente le causaron su muerte, tras la golpiza que le propinaron la noche del 10 de septiembre en los separos municipales.
Los padres y la esposa de la víctima explicaron que como consecuencia del maltrato físico del que fue objeto, Ángel Eduardo comenzó a tener secuelas, por lo que su esposa lo traslado el día 11 de septiembre al Hospital General de Cuernavaca, donde fue atendido después de varias horas de espera, pero perdió la vida el 17 de septiembre por un infarto.
El joven dejó en orfandad a dos menores: uno de siete años y otro más de año y medio. Fue detenido en la colonia Prohogar, por supuestamente haber participado en una riña en un baile popular.