CRIMEN ORGANIZADO AMENAZA A ALCALDES DE JOJUTLA,CUAUTLA Y CUERNAVACA, PIDEN DIRECCIONES DEL AYUNTAMIENTO

El gobernador de Morelos, Graco Ramírez, reveló que las organizaciones del crimen organizado que operan en la entidad, han amenazado de muerte a los alcaldes electos de las principales ciudades, para que les entreguen los tres principales cargos administrativos de estos ayuntamientos. Y explicó, “sé también que están amenazando a presidentes municipales o insinuándoles que si ellos no logran directores a modo, van a actuar, para que no tengan problemas ellos, yo resuelvo el problema, yo nombro al director metropolitano de la policía”. Los municipios amenazados, ahora tienen resistencia en aprobar el mando único, porque esto implicaría que las organizaciones criminales no tendrían posibilidades de controlar los cuerpos de seguridad, de ciudades como Jojutla, Cuautla y Cuernavaca. El mandatario agregó, “los delincuentes amenazan con tres cosas, que quieren al director de la policía, quieren al director de gobierno y quieren al de obras públicas, esto existe en los tres ayuntamientos más importantes de Morelos”. Detalló la forma en que los delincuentes sacan provecho de estos cargos, “ellos piden que se les entreguen las obras públicas porque ellos hacen las obras, ellos piden que se les dé el director de gobierno porque ellos autorizan los giros negros y piden el director de la policía para que trabaje para ellos, son las presiones que hemos tenido”. A 12 días de que entren las nuevas corporaciones, el gobernador insistió, “no estoy juzgando en particular a nadie, estas son las investigaciones que hemos hecho y las evidencias que tenemos, bueno vamos a corregirlas haciendo el mando único coordinado, por eso no es un capricho, es una necesidad para que tengamos resultados en Morelos”. Por el momento, el gobernador indicó que está garantizada la seguridad personal de los alcaldes, pero se requiere que estos ediles se sumen a la conformación de un mando único, al final, el gobernador insistió en solicitar a los alcaldes que permitan que el estado sea quien tome el control de la seguridad pública.