2012/03/01

PRESENCIA MILITAR ANTE EL INCREMENTO DE LEVANTONES EN LA ZONA SUR DE MORELOS

Militares y policías federales incrementaron su presencia y patrullajes en la
zona sur del estado, dentro de los operativos anunciados por las autoridades, en
medio del registro de constantes secuestros a ganaderos y gente acaudalada de la
región, en tanto en la zona conurbada por igual se han incrementado las
extorsiones telefónicas y plagios.
Pero además otro hecho que provocó el despliegue de elementos de las fuerzas
federales fue el atentado que sufrió la noche de este miércoles, el elemento de
la policía rural de Jojutla, Ricardo Toledo Díaz de 47 años de edad, en el
poblado del Jicarero.
El policía rural recibió cuatro impactos de bala de manos de presuntos sicarios
del crimen organizado que lo tienen hospitalizado, cuando regresaba de realizar
recorridos de vigilancia junto con otros de sus compañeros, en tanto militares y
policías federales, buscan a sus agresores.
Se destacó que los policías rurales son voluntarios de la región que reconocidos
legalmente por las autoridades, coadyuvan con los distintos cuerpos de seguridad
en la prevención y combate de delitos en las zonas rurales, como el abigeato y
los robos en general.
Dentro de este despliegue realizado este jueves por militares y policías
federales, estos prácticamente sitiaron poco después del medio día el centro del
municipio de Zacatepec luego de que trascendió que presumiblemente grupo de
sicarios rondaba el lugar, sin embargo hasta el momento no se sabe de
detenciones.
Por otra parte en medio del temor de los habitantes de estas zonas de Morelos
que en la mayoría de los casos no denuncian tras ser amenazados por los
delincuentes y de que asesinen a sus familiares secuestrados, se ha logrado
saber que en los últimos días en la zona sur por lo menos cuatro ganaderos han
sido plagiados, otras tantas personas con cierta capacidad económica.
Mientras tanto en municipios como Temixco y Emiliano Zapata, va en incremento la
extorsión telefónica, ya que diferentes grupos delincuenciales, aprovechando el
temor de la población por la impunidad de que hacen gala, llaman a sus víctimas
y las amenazan de muerte a ellos y a sus familiares si no les depositan
determinadas cantidades de dinero en ciertas cajas de negocios con funciones de
banco como Elektra y ante esto las autoridades se han visto una vez más
rebasadas.
Por otra parte vecinas de comunidades como Acatlipa y sus alrededores en el
municipio de Temixco, han sido víctimas de secuestros y violaciones por
sedicentes sicarios del crimen organizado, quienes tras privarlas de su
libertad, las mantienen encerradas en casas de seguridad, en donde bajo
terribles amenazas de muerte, las atacan sexualmente, situaciones que por igual
no están siendo denunciadas por el terror de las mujeres atacadas y sus
familias.